¿QUÉ ES?

 

Una polipectomía consiste en separar el pólipo de la pared del colon a la que está unido. La mayoría de las veces se realiza por vía endoscópica.

Para ello y dependiendo del tamaño, morfología y localización del pólipo, se pueden utilizar diversos instrumentos como pinzas o asas, que son unos lazos metálicos que a modo de bisturí van cortando el pólipo a la vez que cauterizan la base de resección para que el corte no sangre, y que introducidos a través del canal de trabajo del endoscopio permiten su resección.

En ocasiones, las características morfológicas del pólipo no permiten su extirpación por vía endoscópica y se tiene que llevar a cabo por vía quirúrgica.

Para la programación de una polipectomía endoscópica es necesario acudir previa y personalmente a la consulta. Una vez allí se le explicará en qué consiste la técnica, posibles complicaciones, procedimientos alternativos, la preparación previa y necesaria a la misma, se le entregará el documento de consentimiento informado que deberá traer firmado el día de la exploración.

¿Qué es un pólipo?

Se trata de una lesión de tamaño variable, desde pocos milímetros hasta varios centímetros, que crece desde la pared del colon hacia la luz intestinal. Pueden ser únicos o múltiples y, además del tamaño, también existen variaciones respecto a la forma, pudiendo ser pediculados o sesiles dependiendo de si la superficie de fijación a la pared del colon es en forma de “tallo” o plana respectivamente. Sin embargo, la clasificación más importante es la que distingue entre aquellos pólipos con capacidad para malignizarse (adenomatosos) frente a los que no la tienen.

¿En qué consiste una polipectomía?

Una polipectomía consiste en separar el pólipo de la pared del colon a la que está unido. La mayoría de las veces se realiza por vía endoscópica. Para ello, y dependiendo del tamaño, morfología y localización del pólipo, se pueden utilizar diversos instrumentos (pinzas, asas, lazos, clips…) que introducidos a través del canal de trabajo del endoscopio permiten su resección. En ocasiones las características morfológicas del pólipo no permiten su extirpación por vía endoscópica y se tiene que llevar a cabo por vía quirúrgica.

¿Qué debo hacer para realizarme una polipectomía?

Debe acudir previamente a la consulta. Una vez allí se le explicará personalmente la técnica, se le entregará un documento de consentimiento informado que deberá traer firmado el día de la intervención y se le solicitará, si fuese necesario, un estudio preoperatorio.

¿Por qué es importante extirpar los pólipos?

El cáncer de colon es el segundo tumor más frecuente en España y la segunda causa de muerte relacionada con el cáncer en nuestro país, únicamente superado por el cáncer de pulmón. La mayoría de los cánceres de colon se desarrollan a partir de un pólipo que con el tiempo ha ido creciendo para acabar degenerando en un cáncer de colon. Con la polipectomía se interrumpe la secuencia pólipo-cáncer de colon.

¿Qué síntomas produce un pólipo?

Generalmente ninguno. Salvo aquellos pólipos de gran tamaño o localizados muy cerca del ano, el resto son hallazgos casuales cuando se realiza una colonoscopia indicada por unos síntomas que no tienen porqué guardar relación con el pólipo. No es infrecuente que se diagnostiquen durante el curso de colonoscopias efectuadas por la existencia de episodios de sangrado a través del ano que no proceden de los propios pólipos, sino de lesiones de la región anal, como hemorroides o fisuras.

Si no produce síntomas, ¿cómo puedo saber si tengo un pólipo?

La colonoscopia es el mejor método para el diagnóstico y tratamiento de los pólipos. Teniendo en cuenta que la mayoría son asintomáticos, que tienen capacidad para degenerar en un cáncer de colon y que éste es más frecuente a partir de los 50 años es por lo que se recomienda la realización de una colonoscopia a partir de los 50 años e incluso antes dependiendo de la existencia de una serie de factores de riesgo relacionados con el cáncer de colon aunque el paciente no refiera ningún síntoma.

¿Puede tener complicaciones la realización de una polipectomía?

Los principales factores de riesgo para la aparición de complicaciones son los pólipos de gran tamaño, los pólipos planos y aquellos localizados en lugares de difícil acceso o donde el colon tiene la pared más delgada (fondo de saco ciego y colon ascendente). Para realizar una polipectomía se suelen utilizar unos lazos metálicos que a modo de bisturí van cortando el pólipo a la vez que cauterizan la base de resección para que el corte no sangre. De ahí, que las principales complicaciones sean la hemorragia, la perforación y el síndrome postpolipectomía.

Según la gravedad de la complicación podrá ser manejada de forma conservadora pero en otras ocasiones será necesario el tratamiento quirúrgico.

¿Debo quedar ingresado después de una polipectomía?

Generalmente no. Después de la realización de la polipectomía se le entregarán una serie de recomendaciones y podrá irse a su domicilio. Sólo quedaría ingresado en aquellos casos en los que surgiese alguna complicación o que fuese aconsejable realizar una vigilancia clínica más estrecha.

Si me han quitado un pólipo, ¿cuándo tengo que hacer la siguiente revisión?

Una vez resecado el pólipo se remite al Servicio de Anatomía Patológica para su estudio histológico. Dependiendo del tipo de pólipo, tamaño, número y otra serie de factores se le indicará cuándo es aconsejable realizar la siguiente revisión.

Para programar una polipectomía endoscópica es necesario que previamente acuda a la consulta. Una vez allí se le explicará en qué consiste la técnica, posibles complicaciones, procedimientos alternativos, la preparación previa y necesaria a la misma, se le entregará el documento de consentimiento informado que deberá traer firmado el día de la intervención y se solicitará, si fuese necesario, un estudio preoperatorio.